las tierras de lulera.

tengo una amiga con la que nos deformamos los apodos. ella es luli, le digo lulera. yo soy mapu, me dice mapusa. resulta que ella se fue de paseo muy lejos, porque tiene hormigas no sólo en el culo como la gente inquieta y curiosa, sino que también tiene en los pies y por todo, todo su ser, así que es muy inquieta y aún más curiosa. y en ese paseo pasó por un lugar que se llama mapusa y con una paloma mensajera-cibernética me avisó que se acordó de mí. no llegó a aclararme si esas tierras lejanas son cursis, pero aunque está lejos no pierde la capacidad de alegrarme el día con curiosidades de este tipo. así que ahora yo me imagino las maravillosas tierras de lulera, que seguro son inquietas y curiosas, y espero alegrarle el día a ella desde las corroidas, pero no por eso menos maravillosas, tierras de lanús.

la ceguera opuesta.

y soñó que se quedaba ciega, porque tenía que dibujar. pero no veía todo negro, veía todo blanco al abrir los ojos. y el dibujo no fue gran cosa, igual estuvo bien. pero después hubo uno que quedó muy lindo. y entonces cuando abras los ojos vas a ver la luz. la luz que no es dios, pero es copada. o la luz que no es dios y por eso es copada. por lo tanto, hay que coparse más y ver la luz.